Llevamos unas semanas probando el teléfono que quiere ser el más inteligente del mercado, el Google Pixel 8 Pro. Y, a pesar de que se está distanciando de esa imagen de teléfono asequible en la gama alta, sin ser del todo un ‘flagship’, Google sigue manteniendo un precio algo por debajo de lo que cuesta un iPhone Pro o alguno de los Samsung Galaxy más potentes. Con todo, si lo quieres parte de los 1.099 euros.

Se trata de un móvil lleno de inteligencia artificial, gracias a un procesador ideado exclusivamente para este teléfono y cuyo foco se encuentra, precisamente, en el la IA. Google sabe que la carrera por la inteligencia artificial, que, por ahora, lidera OpenAI con ChatGPT, pasa por llegar al máximo número de personas posibles, con tecnología útil para el día a día.

Un diseño resbaladizo
Comencemos por el exterior. El Pixel 8 Pro es un teléfono elegante gracias a su diseño estilizado y su parte trasera de cristal. Es cómodo de sostener, con unas dimensiones de 76.5 x 162.6 x 8.8 mm y un peso de 213 gramos. Se siente mucho más fino en la mano en comparación con sus predecesores. Además, el acabado satinado y el vidrio pulido le otorgan un toque sofisticado, manteniendo la característica banda que rodea las cámaras, un sello distintivo de Google desde el Pixel 6.

Eso sí, les pasa igual que al resto de Pixels desde hace tres años, el conjunto de cámaras sobresale tanto, y la parte trasera es tan lisa, que patina en cualquier superficie con un mínimo de inclinación. Generalmente usamos fundas como una opción para proteger el móvil, pero en este caso es completamente necesaria, sin ella, el Pixel 8 Pro acabará irremediablemente en el suelo.

La pantalla es una OLED de 6.7 pulgadas y una resolución de 1344 x 2992 pixels, con la que el terminal ofrece una buena experiencia visual. Además, la tasa de refresco de 120Hz asegura una navegación fluida y una visualización clara incluso bajo la luz directa del sol. No es el mejor panel del mercado, pero es una gran pantalla que cubre prácticamente la totalidad del frontal.

Un chip único
Como ya hemos comentado anteriormente, su característica más destacada es su chip Google Tensor G3, ya que es el único teléfono del mundo que lo equipa. El doble de rápido que el G1, e infinitamente más capaz. Y viene con unos nada desdeñables 12 GB de RAM.

El rendimiento del Pixel 8 Pro es sobresaliente, manejando múltiples tareas con facilidad. Si lo comparamos con otros procesadores, como el Snapdragon Gen2 presentado el año pasado, la CPU de Google todavía está lejos de alcanzarlo, con puntuaciones en Geek Bench de 1.407 puntos en ‘single core’, mientras que el Snapdragon llega a los 1.880 puntos.

Google siempre insiste en que el fuerte de su procesador se encuentra en la inteligencia artificial, algo que es difícil de medir y comparar. Los rumores del nuevo Snapdragon Gen3 que se lanzará en pocos días, parece que podrían llegar a duplicar la capacidad del Tensor G3, lo que no deja en buen lugar al procesador de Google. Un punto controvertido siendo uno de los puntos característicos del teléfono.

La cámara es, sin duda, una de las características más impresionantes del Pixel 8 Pro con una configuración de triple cámara en la parte trasera. Además, el zoom 5x es notablemente superior al resto de lo que hemos probado, brindando imágenes nítidas sin perder resolución incluso en el zoom digital, gracias a la IA.

Cámaras
El Pixel 8 Pro está equipado con un sensor principal de 50 megapíxeles, capaz de grabar videos a 4k, con un buen rendimiento con baja luz, gracias una apertura máxima de f/1.68. El objetivo que realmente sorprendente es el telefoto de 48 megapíxeles con un zoom óptico de 5x, f/2.8, un campo de visión de 21° y un zoom digital de hasta 30x.

Foto a 30 aumentos
La inteligencia artificial del ‘superzoom’ permite obtener imágenes que, aunque estemos usando el zoom digital, se ven muy bien definidas, incluso mientras estamos grabando video. En un futuro, en una actualización de la cámara, Google ha comentado que llegaremos a 100 aumentos de zoom digital con una mínima pérdida de calidad.

Imagen con el gran angular.
La cámara ultra gran angular de 48 megapíxeles presenta una longitud focal equivalente a la de un 11mm, junto con una apertura máxima de f/1.95, que también ejerce como macro. En general todos los objetivos son mucho más luminosos que los de su predecesor, el Pixel 7 Pro.

Imagen con poco luz
En cuanto al color, tiende a sobresaturar ciertos colores como las hojas y la hierba, es decir, los verdes, pero es lo normal hoy en día. El ‘Video Boost’ que todavía no hemos visto, promete mejorar la calidad de video en los servidores de Google, sobre todo en el video nocturno. La cámara frontal, es similar a la del Google Pixel 7 Pro, con 10,5 megapíxeles de resolución, pero que ahora incluye autofoco, que mejora los resultados en fotografía en movimiento.

Con una batería de 5050 mAh, el Pixel 8 Pro puede llegar sin problema a un día o día y medio de autonomía, además, ofrece carga inalámbrica.

Mucha IA
Google ha llevado la inteligencia artificial a un nuevo nivel con el Pixel 8 Pro. La integración profunda de la IA mejora no solo la fotografía sino también la experiencia general del usuario. Funciones como el Borrador Mágico y el Editor Mágico, aunque aún necesitan pulirse, muestran un gran potencial.

El editor mágico permite hacer cosas que parecen cosa de magia, mover objetos en una foto con sólo señalarlos, cambiar el fondo, o incluso generar una foto completamente diferente a partir de la original, como si se tratara de una herramienta de imagen de IA Generativa como Dall-E. La grabadora, asistente en llamada, y los subtítulos para videos funcionan de manera impresionante gracias a la IA.

Todavía hay muchas funciones que no hemos visto, como la integración con Bard en el asistente de Google, o los mensajes escritos con inteligencia artificial, pero con los 7 años de actualizaciones que ha prometido Google, seguro que los veremos en el futuro.

Fuente: ABC.es